martes, 30 de octubre de 2018

Petrarca: il Canzoniere

El Canzoniere de Petrarca, llamado también Rime sparse o Rerum vulgarium fragmenta (fragmentos de escritos en lengua vulgar) es un conjunto de trescientos sesenta y seis poemas: sonetos, canciones, baladas, madrigales y sextinas que no se suceden enforma cronológica.
La obra se organiza en dos partes: In vita e in morte di Madonna Laura. El tema dominante es el amor en diversos aspectos, pasión, dolor, sufrimiento de amor, conflicto entre amor y conciencia religiosa, nostalgia. Se trata de un diario interior donde se plasman contradicciones, errores, debilidades del sujeto poético.
Dice Giuseppe Petronio que "la lengua de Petrarca se halla en las antípodas de la de Dante" (Historia de la Literatura italiana: 1990, 134). Es una lengua que  no evidencia ya el uso de provenzalismos ni sicilianismos. Su poesía, dice Petronio, "sabe dar a las palabras una vibración que las hace preciosas y las impregna de una intensa fuerza sentimental y melódica."
Miniatura del siglo XIV: Laura e Petrarca

2 comentarios:

  1. Análisis del poema “La ciudad sin laura”
    El poema "La ciudad sin Laura" de Francisco Luis Bernárdez evoca a una mujer que se encuentra ausente físicamente y solo tiene entidad a través del lenguaje. Es el por propio acto de nombrarla la que da plenitud a este sujeto poético enamorado. Este dulce nombre que pronuncia tiene una doble acción transformadora: poblar el desierto que habita en su alma (v.v. 17-20) y convertirse en la fuente de existencia de ese sujeto. No podría interpretarse que Laura es el ideal de eso yo no alcanzado porque más adelante se enuncia "cuando el amor está presente no puede haber/ nada escondido ni lejano" (v.v. 67-68). No hay asimetría ni tampoco una ilusión narcisista. Estamos ante la forma más excelsa del enamoramiento, pues la manía erótica manifiesta en esa "llamarada" o en esa "luz del fuego" que envuelve a ambos sujetos (v.v. 71-74), es la base para la contemplación de las ideas. Permítame incluir un fragmento de Fierro (2012) sobre esta locura que subyace en esta práctica filosófica. Para la autora, este modo de vida que nos otorga grandes bienes, nos "permite desarrollar la habilidad de estar en frecuente contacto con el objeto último y auténtico del amor - la Belleza en sí y las ideas en general". Ese nombre que resuena en el rumor del río y alumbra la caverna de ese espíritu solitario es el que le permite a este sujeto poético comprender la realidad eidética porque "este nombre de/ mujer las ilumina" (v.v.21 - 22), "las arranca de las tinieblas/ en que estaban sumergidas" (v.v. 23-24). Este nombre no produce ningún displacer al yo, es decir, le da una vida "sin dolor ni sobresalto" (v. 82).

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  2. ¿Se advierte alguna vinculación entre Laura de Petrarca y Laura de Bernárdez? ¿Cómo es el discurso poético del autor italiano? ¿Y el de Bernárdez? ¿Cómo construyen la figura de la mujer amada?

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